Visitas hasta ahora

Cambio


Mudanza, transición. Cambio. Transformación, metamorfosis. Cambio


Cada paso que damos es un cambio. Cambio hacia un nuevo lugar, hacia un nuevo momento, una nueva situación. A veces parecida, siempre distinta. Quizás muy cerca, pero siempre otro sitio.
Cada palabra que soltamos es un cambio en la conversación, en la mente del otro, en nuestra propia mente. Y cada cambio conlleva a todo un abanico de nuevas posibilidades, algunas mejores que las anteriores, otras sin duda peores. 

Y no sólo pasos, o palabras. Cada movimiento, cada gesto, cada mirada, cada pensamiento, cada decisión que tomamos y cada una de las que no tomamos, el camino que escogemos o el que dejamos atrás, pero también aquél que no sabemos ni que existe. Cada amigo nuevo que hacemos, cada amigo que olvidamos, cada recuerdo borrado por una nueva imagen. Cada comida que cocinamos o nos cocinan, cada prenda que renovamos en el armario. Nunca nada es igual. Por pequeño que sea, siempre hay un cambio. 


A menudo tememos ese paso de un estado a otro que pocas veces sabemos cómo será. Por ello hay muchos reacios al cambio, y muchos adictos a él también.
Ciertos sectores consideran el cambio algo bueno únicamente cuando las cosas van mal y hay que buscar soluciones, si las cosas van bien...  virgencita que me quede como estoy; muchos otros adoran la innovación, la mudanza, el no saber nunca qué puede ocurrir en cada momento... No me voy a decantar por ninguna.

Vayamos a lo terrenal. Antes tenía Facebook, ahora tengo también Twitter. Tenía un móvil de los que llamaban y enviaban mensajes y  no entendía a todos aquellos que necesitaban internet en su móvil... ahora no sabría qué hacer sin mi Blackberry. Me creía muy feliz libre y sin pareja, ahora nos queremos ir a vivir juntos. Creía que mi carrera era lo más importante y mi salida definitiva, ahora busco trabajo para poder empezar otra carrera distinta. Antes pesaba más de 120kg, ahora rondo los 75. 

Todas estas decisiones en su momento me parecían insensatas, desmesuradas, inútiles o improbables. Una vez ha pasado la transición y estamos asentados en nuestro nuevo estado todo nos parece muy fácil, e incluso nos sorprendemos de cuánto nos costó tomar esa u aquella decisión pero... si nos volvieran a poner contra las mismas cuerdas, volveríamos a dudar si pasar por debajo de ellas y salir del ring o coger impulso para golpear de nuevo. 

Eso sí, seguro que el golpe será distinto...


Soy diferente cada día, y sin duda muy distinto del que escribió la última entrada en este blog. Pero de momento no ha cambiado mis ganas y mi pasión por darle vueltas a todo aquello que me rodea, y por ello retomo este espacio.

2 comentarios:

Santo dijo...

Molt gran Victor! ma agradat molt!! anims!

appelsin dijo...

http://www.youtube.com/watch?v=vwc-sAzHPfc